¿Cuánto se ha ocupado la filosofía del proceso conocido como dormir y de su experiencia derivada de él, que llamamos sueño?
Lo cierto, digamos lo que digamos, y hablemos lo que hablemos, que resulta un campo de nuestra vida muy importante. No solo porque ocupa gran cantidad del tiempo que estamos vivos, sino porque en él se desarrollan infinidad de símbolos y sensaciones, señales y remembranzas, y hasta incluso a veces premoniciones que no podemos dejar de considerar.
Una experiencia
Nos recostamos como siempre a descansar y sentimos extrañamente la consciencia de inflarnos, de mecernos, o elevarnos y pronto abandonamos nuestro cuerpo para verlo desde una perspectiva ajena, externa.
¿Estoy muerto? ¿Que me está pasando? El temor nos agita y despertamos nuevamente en nuestra habitación ¿Que fue eso?
Muchas personas viven esto sin haberselo propuesto, sin saber siquiera de que se trata. Solo se acostaron como cualquier otro día y zas, sucedió!
¿Que es soñar?
Todos los seres humanos al descansar abandonamos nuestro cuerpo físico para que éste quede libre de la actividad incesante de la mente. Ella sigue funcionando por lo que la experiencia fuera de él, que recordamos como un sueño, se desenvuelve en un plano no físico, mientras nuestro cuerpo se recompone. Ese territorio es llamado habitualmente "mundo astral", y lo abordamos con nuestro cuerpo astral (que es quien "se lleva" consigo la mente) y que se mantiene conectado por medio de un delgado y etéreo hilo al cuerpo físico.
No somos casi nunca conscientes de ese movimiento, pero a veces pasamos en la vida por períodos de mayor lucidez en los que podemos darnos cuenta que lo que estamos viviendo es un sueño, en el mismo momento en que ocurre. También puede sucedernos como en el ejemplo anterior, una situación en la que sencillamente percibimos el momento exacto en que abandonamos nuestro cuerpo para que descanse, para vagar en este otro mundo de extrañas señales, el astral.
¿Es peligroso?
Muchas personas, temerosas, señalan que lo descrito aquí es algo peligroso, que no debe hacerse, que debe evadirse a toda costa.
Lo cierto, es que soñar es un proceso natural e inevitable. Todos los seres humanos lo viven de manera inconsciente, y algunos pocos lo practican de manera consciente.
Si el abordaje al mundo astral representara alguna razón de temer, como señalan algunos ¿No sería mejor enfrentarlo de manera consciente?
Lo que se debe entender aquí es que el desdoblamiento astral es inevitable. O se hace inconscientemente (sueño), recuérdese o no, o se hace realiza de manera consciente (desdoblamiento, o viaje propiamente dicho). Que es más peligroso ¿Salir a la calle con los ojos vendados o sin la venda?
¿Que sentido tiene?
La experiencia tiene el mismo significado que la vida, porque es parte de la vida, y tan importante como lo que vivenciamos en vigilia.
El mundo astral tiene sus propias reglas, sus propias leyes. En la medida que seamos conscientes de nuestro desenvolvimiento en ese plano conoceremos estos procesos y sabremos aprovechar al máximos sus posibilidades.
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